Mónica Ayos, Diego Olivera y sus hijos, en el living de Susana

Los problemas del chico en el colegio por las materias que se suele llevarse, fue el puntapié inicial para la charla. Federico, quien aún no tiene novia –según lo dicho por él mismo-, confiesa sin miedo que es medio “vaguito” a la hora de estudiar, cosa que luego compensa teniendo que estudiar para rendir todas las materias juntas.
¿Ustedes fueron al mismo colegio?- preguntó la Diva
-Sí, pero él me lleva 5 años.-comunicó Mónica.
-Yo era un gordito simpático, no le convenía conocerme- remató Diego.
-La charla salió de casualidad y cuando nos dimos cuenta que habíamos hecho la secundaria en el mismo colegio… no lo podíamos creer- recuerda ella.
¿Cuándo fue la primera vez que sentiste algo por él?
-La primera vez que lo vi. –se emociona Ayos
-A mí me pasó lo mismo. Hubo una energía muy fuerte. Igualmente hay que seguir laburando para que la pareja marche bien.-acompaña Diego.
¿Y Federico tuvo buena onda?
-El primer encuentro fue en un bar. Yo estaba con mamá y él entró y lo primero que hizo fue pedirme el cuaderno.- todos rieron
¿Terminaste tu contrato en México?
No, hay toda una relación armada. México es un país que me dio todo. Pero yo también necesito estar con mi familia… es muy complicado. Yo estoy muy agradecido.
¿Es verdad que le compusiste una canción?
Si, al año de conocerlo.- De inmediato, la mujer homenajeó con su composición a su amor.
Luego, Diego habló de las oportunidades que le dio nuestro país y agradeció el éxito en México. Privilegio su familia y dijo que ése era su verdadero éxito en la vida.
Entre otras cosas, Mónica le confesó a Susana haberse hecho la nariz, cosa que la Diva ya había notado y felicitó por lo bien que le sienta en el rostro a la actriz.
Para terminar, no faltó el mix de fotos de la familia unida.


Fuente: primisiasya.com